La explotación minera de San Martín reunió a 36 participantes en el primer certamen de pintura rápida, convocado por Hunosa
Arancha Bejerano, trabajando en su cuadro. J. R. SILVEIRA
El escenario en el que se celebraba el certamen, una explotación minera, atrajo a varios de los participantes. «Me pareció una idea original poder pintar un paisaje industrial. Rompe tendencias», aseguró la gijonesa Nieves Álvarez Sánchez, mientras pintaba el castillete del pozo. A unos metros el también gijonés Alberto Amaz, fijaba su mirada en la montaña próxima a la explotación minera. «Me llamó la atención porque se celebraba en un pozo y se suele hacer en otros enclaves más turísticos», indicó. Este es «un escenario muy guapo para pintar», comentó, destacando que la meteorología y temperatura también acompañaba.
Arancha Bejerano, de Carbayín, llegó con todo el material a las diez y media de la mañana. Este fue el segundo certamen de pintura rápida en el que participó. «Me gustaba la idea de venir a pintar en una explotación minera y pasar un buen día», dijo. José Francisco Caso no es de los habituales en este tipo de concursos pero cuando se enteró de cuál sería el escenario decidió participar. Ayer, a la sombra de un árbol, hizo hincapié en que «aunque no soy especialista en pintura rápida, decidí venir por el sitio».
Ya por la tarde, el jurado integrado por los pintores Samuel Armas, Mónica Dixon y Natalia Pastor emitió su veredicto. José Enrique Pinín García se llevó el primer premio, dotado con 500 euros, por su obra «Sotón, de la tierra al cielo». Néstor López Casas fue segundo con «El pozu» y José María Díaz Martínez tercero con «Pozo Sotón». Recibieron 300 y 200 euros, respectivamente. Sus trabajos y los del resto de participantes podrán ser contemplados por los visitantes desde esta semana.